Estoy harta

 

Con el permiso de todos ustedes me voy a salir un poco de la temática del blog para contarles lo que me pasó hace un par de días en Instagram.

Como muchas otras veces, un señor, por así llamarlo, me envía una foto de su pene por privado.

Normalmente denuncio, bloqueo y elimino. Otras simplemente elimino…. Depende.

Pero esta vez, harta de este tipo de prácticas, le tomé una captura de pantalla al miembro del susodicho, y me dispuse a subirla a mis Stories, contando un poco lo que había pasado. Cual fue mi sorpresa al darme cuenta de que Instagram la eliminó ipso facto y me bloqueó (y sigo bloqueada).

Entiendan mi indignación al darme cuenta de que además de víctima de la conducta de este tipo, Instagram me castiga doblemente bloqueándome, callándome, silenciándome…

Y me pregunto que filtros tan poderosos pueden llegar a tener que detecten una foto de contenido sexual explícito en mi storie dos segundos después de subirla, y no en el mensaje del tipo, que las envía por docenas, a cuentas de contenido erótico y no erótico, que lo sé de buena tinta.

En fin, que me cansé de eliminar mensajes privados de este tipo y mirar para otro lado. A partir de ahora todo el que me los envíe será expuesto en mis redes sociales. Y si les pasa, me lo pueden contar y les ayudo a darle visibilidad también.

Estos tipejos se aprovechan de que muchas veces no decimos nada porque… “si me envía ese contenido será porque me habré insinuado de alguna forma…. me habrá malinterpretado…” Porque en el fondo, nos seguimos diciendo esto a nosotras mismas… ¿les suena?

Basta de culpabilidad, de machismo, llamemos a las cosas por su nombre.